martes, septiembre 15, 2009

No hagas promesas que no vas a cumplir, no habras la boca sin saber qué decir, toda tu vida es una historia sin fin, y al final de lo que hacés te arrepentís. Te dí mi tiempo y toda mi atención y me llevé una gran desilusión. El fusible de mi cabeza estalló y el cortocircuito lo causaste vos. No te conozco pero sé quien sos, ya me crucé con gente como vos. Andá buscandote una religión, porque de esta no te salva ni Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

personitas comentaron

robablemente ya de mí te has olvidado, y sin embargo yo te seguiré esperando. No me he querido ir, para ver si algún día que tu quieras volver, me encuentres todavía. Por eso aún estoy en el lugar de siempre, en la misma ciudad y con la misma gente. Para que tú al volver no encuentres nada extraño, y sea como ayer, y nunca más dejarnos. Probablemente estoy pidiendo demasiado, se me olvidaba que lo nuestro había terminado. Que nunca volverás, que nunca me quisiste, se me olvidó otra vez que sólo yo te quise

Archivo del blog